La Creolina es un producto desinfectante de uso múltiple que se utiliza en el ámbito doméstico e industrial.
Su potente fórmula permite eliminar bacterias, hongos y otros microorganismos, convirtiéndola en una opción ideal para mantener ambientes limpios y saludables.
Se emplea tanto en la limpieza de superficies como en la desinfección de aguas residuales, e incluso en el control de malos olores.
Su efectividad es respaldada por décadas de uso y es ampliamente utilizada en hospitales, industrias alimentarias, y hogares.